Los tiempos han cambiado y la sociedad está ahora mucho más involucrada en la conservación y defensa de la naturaleza. Todas las industrias buscan respetar el medio ambiente, no afectar negativamente al mundo y consumir menos recursos. Es por ello que, poco a poco, ha cambiado la forma de hacer y diseñar piscinas, entrando en escena nuevos recursos y propuestas.
Ciertamente empezar por una piscina totalmente ecológica sin uso de productos químicos ni bomba de agua, es complejo por la necesidad de instalar dos zonas diferentes; una de ellas con espacio para plantas que limpien el agua. Por ello, antes de decirte cómo sería construir una de estas piscinas, vamos a darte una alternativa muy interesante.
Cubiertas de piscina como medida ecológica
La forma de subir la temperatura del agua de forma natural y, además, evitar el mantenimiento constante de su agua (disminuyendo el uso de productos químicos) es la instalación de una cubierta para tu piscina.
Las piscinas se ensucian sobre todo por agentes externos como el viento, la lluvia o los bichos, pero es evitable si su agua está cubierta con una buena protección como las que ofrecemos en Cubriland. Por tanto, dicha protección con cubiertas te permite ahorrar y, al mismo, tiempo proteger al planeta de esos químicos.
Esta será mucho más agradable con el medio ambiente y te generará menos gastos de mantenimiento. No obstante, también hay mucho más por conocer en la construcción de una piscina ecológica que, a continuación, te contamos, ya sea cubierta o no.
Ventajas de las piscinas ecológicas
Tendrás una experiencia de baño más natural y la sensación de estar disfrutando de un estanque o lago y no de un vaso frío y artificial.
Tu salud no se verá expuesta a tantos productos químicos de la construcción.
Gastarás menos dinero porque ahorrarás en los típicos químicos que tienes que poner en la piscina de forma habitual.
No vas a correr el riesgo de sufrir alergias cutáneas ni irritaciones oculares o de las mucosas.
Puedes experimentar con la forma de la piscina y salir de los parámetros establecidos.
Lo único de lo que tienes que estar pendiente es de rellenarla cuando haya disminuido su nivel por acción de la evaporación.
Si tenías alguna duda sobre las piscinas sostenibles, seguramente estas ventajas te hayan demostrado que es una excelente opción. En el caso de que te animes a construirla, te podemos decir que vas a disfrutar de una instalación que sorprenderá a propios y extraños y que te permitirá sentirte un poco más conectado con la naturaleza.
Sigue leyendo cómo construirla.
¿Cómo hacer una piscina ecológica?
Una piscina ecológica es estupenda, en especial por su aspecto visual, puesto que permite lograr una completa armonía entre el jardín y la zona de baño.
Este tipo de piscina transmite la sensación de estar libres en la naturaleza, recordando a esas aventuras que quizá viviste de niño cuando pasabas el día cerca del río o del lago del pueblo. Es, por lo tanto, un proyecto que te encantará. ¿Cómo hacerlo? Sigue estos pasos:
Paso 1. Escoge la zona
Debes revisar cuidadosamente las condiciones del terreno para determinar cuál es el mejor lugar para hacer la piscina. No puedes olvidar que el sitio deber ser suficiente para tener dos espacios. Para saber claramente las condiciones del terreno, es recomendable solicitar los servicios de un experto que analice tu jardín.
Paso 2. Define los espacios
En este tipo de piscinas se utilizan dos espacios. Uno será la zona de esparcimiento y disfrute, y el otro la parte donde se realizará la depuración o filtrado del agua. El espacio dedicado a la depuración debería ser mínimo de un tamaño equivalente al 20% de la zona de baño. La profundidad de la zona para bañarse debe ser de un mínimo 2 metros.
Paso 3. Excava los espacios
Ahora excava los dos espacios y recúbrelos con una malla impermeable. Tiene que ser transparente, lo que dará un acabado final más natural y creará la sensación de estar en un lago natural.
Paso 4. Coloca las tuberías
Entre ambos estanques se tiene que colocar un sistema de tuberías que permita el flujo continuo del agua. De esta manera se estará filtrando y manteniendo en óptimas condiciones. Lo bueno es que, en el lado de uso, se pueden crear pequeñas cascadas aprovechando que tienes una conexión con el agua filtrada.
Paso 5. Decoración y acabado
En el lado de la filtración o zona de regeneración, es necesario poner distintas plantas, piedras y arena para dar forma a un entorno de primer nivel. Se tratará, normalmente, de plantas acuáticas como juncos o nenúfares para favorecer la regeneración del agua. Incluso las ranas son bienvenidas para alejar a insectos de tu baño.
Las plantas deberían ser suficiente, pero es posible añadir una bomba eléctrica que ayude a hacer circular el agua entre la parte del baño y la de las plantas. Es una forma de asegurar el proceso de limpieza del agua, pero las plantas son lo óptimo en una piscina ecológica.
En el lado de uso, es posible poner piedras en el borde para que se integre mejor en el jardín, mientras que tampoco son una mala opción plantas o accesorios decorativos que realcen el aspecto natural. Dale rienda suelta a tu imaginación y disfruta de todas las posibilidades que tienes en tu mano.
Ante todo, recuerda que, como te hemos mencionado, las piscinas ecológicas o biopiscinas te abren un amplio abanico de posibilidades. Reducirás los costes, pero también, al mismo tiempo, estarás abriéndote a poder diseñar tu zona de baño de multitud de maneras que lleguen a dejar muy satisfecha a tu familia y a tus amigos.
Cuenta con Cubriland si quieres añadir una cubierta a tu piscina. Puedes preguntar al experto a continuación:
Te informaremos sobre los tipos de cubiertas de piscina.
Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Privacy Policy and Terms of Service apply.