Todos sabemos que en verano uno de los elementos más importantes de cualquier jardín es la piscina. Chapuzones con amigos o en familia, ratos nadando, ratos jugando con los más pequeños… un montón de actividades para disfrutar de ella.
Sin embargo, en el invierno, en muchos casos, este elemento de la casa pasa a un segundo plano. Pero es importante también prestarle la atención que requiere. De lo contrario, en la próxima temporada de baño nos encontraremos ante una piscina no apta para utilizar en el momento.
Lo ideal es cuidarla y mantenerla durante todo el año y poder así aprovechar al máximo la temporada estival. Y, sin ninguna duda, la lluvia es una de las causas que más ensucia y estropea el agua de la piscina. Por eso, en este artículo vamos a hablar de los trucos para proteger tu piscina de la lluvia.
Además, ahora que acaba de empezar el invierno y que las bajas temperaturas ya están aquí, es muy interesante poner en práctica estos consejos. De este modo, nos aseguramos de que en unos meses podremos bañarnos sin ningún problema.
No dejar nada a la intemperie
Este punto es esencial, sobre todo si tienes objetos cerca de la piscina. Es muy interesante gurrdar las sillas, mesas y demás objetos decorativos que se colocan alrededor de la piscina. De esta manera evitamos que por el aire, las tormentas y la lluvia acaben dentro de la piscina.
Del mismo modo, hay que evitar que se queden enchufados los accesorios que se utilizan en la piscina con enchufes. Incluso si estos vienen preparados para este tipo de ocasiones. Mucho mejor si se guarda todo. Así se conservará mejor y durante más tiempo.
Cubrir la piscina
En esta época del año mucha gente se plantea si cubrir o no la piscina, para evitar que el agua se ensucie o que los temporales puedan dañarla. Pues bien, es interesante hacerlo para mantener mucho más tiempo el agua y evitar que la suciedad acabe en el agua. La cubierta de piscina puede ayudar a evitar que se ensucie en exceso.
También depende del tipo de temporal o la frecuencia con la que se dan en tu zona. Pues en algunos casos se recomienda quitar la cubierta para evitar que se rompa por las fuertes rachas de viento. Sin embargo, cuando las cubiertas son de calidad, no tiene por qué ocurrir.
Limpiar el agua regularmente
Si la piscina está destapada, lo más común es que el agua se ensucie y se llene de tierra, hojas y suciedad al llover. por lo que es interesante pasarle el filtro con frecuencia o cuando ha llovido. Además de esto, también es recomendable tratar el agua con los productos químicos pertinentes.
Como hemos comentado antes, cuanto más se cuide durante el invierno, menos esfuerzo habrá que hacer para poder utilizar la piscina en verano. Pues este elemento de la casa requiere de un cuidado y una atención especial si queremos que su uso sea frecuente y duradero.
Estos son los tres principales trucos para proteger tu zona de baño ante la lluvia en invierno.
