Aplicaciones y usos del Aluminio

Uno de los elementos más comunes dentro de la corteza terrestre es el aluminio. Por tanto, no es difícil imaginar que, para este elemento, se han buscado cientos y miles de aplicaciones en objetos o instalaciones de nuestro día a día.

No obstante, antes de entrar de lleno en sus usos y aplicaciones, es conveniente que descubras más sobre este material.

¿Qué es el aluminio y de dónde se extrae?

Es un metal no ferromagnético y, aunque eso puede que no te diga nada, lo cierto es que habla de muchas ventajas frente a otros elementos. Además, como hemos mencionado al comienzo, se trata de un elemento muy común: un 8% de la corteza terrestre son compuestos de aluminio.

Se localiza en muchos silicatos en estado natural, pero se extrae, normalmente, en concreto del mineral llamado bauxita. A través de una serie de procesos, se obtiene como resultado el aluminio metálico. Estos procesos son imprescindibles para obtener las aleaciones más avanzadas en beneficios de uso dado que el aluminio puro por si mismo no logra las ventajas que veremos a continuación. Junto con otros elementos, se obtienen infinidad de propiedad y usos.

¿Qué ventajas tiene el Aluminio?

  • El hecho de que sea un elemento fácilmente localizable sobre la Tierra logra que se trate, normalmente, de un material económico. Una ventaja que, sin duda, es su principal reclamo. No obstante, no siempre ha sido así dado que requiere mucha energía eléctrica su proceso de extracción, pero a cambio, cuenta con una larga vida útil y un bajo coste de reciclado

  • También se trata de un material de bajo peso o densidad que hace que sea fácil de manipular y transportar. Siendo, además, un buen conductor de electricidad y calor.

  • Por su parte, otra de las ventajas que deben nombrarse del aluminio es que es altamente resistente a la corrosión por lo que su resistencia al paso del tiempo y las inclemencias es superior a muchos otros materiales.

  • También su resistencia mecánica (fruto a su vez de la baja densidad y fácil maleabilidad) permiten diversas aleaciones.

No obstante, todas estas propiedades son las genéricas que más observamos en las aleaciones de aluminio comunes, pero dependiendo de las mezclas creadas con otros elementos se obtienen unas ventajas u otras.

¿Qué usos se le da al aluminio?

Es muy probable que no veamos aluminio puro en nuestro entorno, pero existen infinidad de aleaciones (en combinación con otros elementos como cobre, cinc, magnesio o silicio) que dan vida a los productos que más utilizamos cada día.

Los usos o aplicaciones del aluminio son infinitas, pero en algunos sectores, este material es especialmente famoso.

1.

Industria Automotriz y Aeronáutica

Debido a varias de las ventajas comentadas anteriormente, el aluminio es muy común en la industria de los transportes.

Su resistencia, la conductividad térmica y la baja densidad hacen que sea el material idóneo para la construcción de piezas para coches, trenes o aviones. Como ejemplo, el fuselaje de un avión es la combinación de aluminio y cobre, pero para otras zonas como las alas puede ser una aleación con cinc.

Se calcula que su peso es un tercio del del acero con lo que se reduce el peso muerto del vehículo y su consumo de energía. La chapa de tu coche seguro que cuenta con aluminio, además de muchas otras partes del vehículo.

2.

Industria eléctrica

Los tubos, recipientes, cableados y algunos aparatos están formados por aluminio. Lo mismo ocurre con alambres dado que la densidad es baja, la maleabilidad alta, pero, además, tiene un bajo punto de fusión.

Es clave, por tanto, en la industria eléctrica en la que está sustituyendo al cobre gracias a una mayor conductividad y menor precio.

3.

Instalaciones y estructuras

En general, en el sector de la construcción, el aluminio es muy utilizado. Podemos localizarlo en techados, fachadas de edificios, marcos de ventanas, vallas o verjas, paneles solares y mucho más.
En concreto, son ampliamente famosos los perfiles de aluminio. Dichos perfiles suelen usarse para fines constructivos, arquitectónicos o industriales.

En concreto, en Cubriland, conocemos bien los perfiles de aluminio dado que algunas de nuestras cubiertas e instalaciones están formadas por este tipo de materiales. En concreto contamos con perfiles que pueden medir entre 150 mm y 4000 mm dado que con ellos nos adaptamos a multitud de espacios, tamaños y formas. Como ejemplo, nuestro modelo de cubierta de piscina Barein está fabricado con este material.

También es posible obtener un acabado diferente al natural del aluminio con la aplicación especial de coloración. Este proceso no solo otorga a los perfiles el color natural del aluminio, sino también un espectro de colores que se logra a través de la coloración electrolítica, que va desde el champán hasta el negro, pasando por los colores bronce. Pero no acaban ahí las posibilidades, con el revestimiento de polvo, un proceso de pintura termoadhesiva, se pueden obtener todos los colores posibles y, gracias al proceso de decoración de madera, también ampliamos las posibilidades.

Nuestros proveedores aseguran la calidad del material gracias a que el control de calidad se mantiene en cada paso y las certificaciones lo avalan. Aislamiento térmico eficaz, alta resistencia a impactos y a temperaturas desde – 40°C hasta +100 °C, montaje sencillo o peso reducido, entre otras características que logran cubiertas de eficacia superior.

Si quieres conocer los usos y aplicaciones concretas del aluminio en cubiertas de piscina, puedes leer nuestro artículo sobre ventajas de las cubiertas de aluminio para piscinas.

4.

Otras aplicaciones del aluminio

Diferentes utensilios de cocina, así como diversos aparatos se fabrican a partir del aluminio. Se moldea fácilmente y también te sonará el papel de aluminio que usamos en la cocina para envolver alimentos y mantener sus propiedades. Su utilidad en conservación o protección frente a la corrosión es una de las grandes propiedades del aluminio.

Finalmente, aunque sea menos conocido, el aluminio está presente incluso en el sector de la medicina y la cosmética. Por ejemplo, en medicina, se utiliza el hidróxido de aluminio como antiácido o en soluciones antisépticas.