¿Es necesario tapar la piscina en invierno?

Convertida en una de las preguntas más frecuentes entre los propietarios de piscinas, esta es una cuestión que requiere una respuesta en profundidad. A continuación, te detallamos los motivos por los que deberías tapar la piscina en invierno.
1.

La temperatura se mantendrá

Podrás despreocuparte totalmente por la climatización de la piscina. Conseguirás mantener una buena temperatura en el agua, con algunos grados por encima de la temperatura que se quedaría en el agua si no estuviera cubierta. Esto es posible que te permita ahorrar y no tener que utilizar ningún sistema externo de climatización.

2.

La limpieza será más eficiente

Durante todo el periodo de tiempo en el que la cubierta de la piscina esté puesta, no tendrás que preocuparte porque el agua se acabe llenando de suciedad. Esta será una gran ventaja, dado que tendrás que hacer menos esfuerzos para mantener el agua cristalina. Además, estarás evitando que caigan hojas, restos de insectos y otros elementos contaminantes que podrían llegar a estropear mucho el agua de la piscina.

Piensa, ante todo, que cuando el agua se ensucia por elementos externos, no solo estás poniendo en riesgo la limpieza, sino que también es posible que se vea afectado el nivel de cloro o pH. Todo ello podría hacer que tuvieras que realizar procesos de ajuste que requerirían tanto tiempo como esfuerzo económico.
3.

Evitarás riesgos y problemas

Todas las familias que tienen perros u otras mascotas que corran libremente por el jardín, así como niños pequeños, están siempre pendientes de que no se produzca ningún accidente en la piscina. Si la zona de baño no está cubierta, existe riesgo de que alguien se pueda caer dentro y que no tengamos constancia de ello, lo que puede resultar terrible.

Al tapar la piscina en invierno y dejar la cubierta puesta de forma permanente, sabrás que no tendrás que volver a preocuparte por este inconveniente.

Nadie se caerá dentro ni habrá problemas incluso si pasan por encima, si corren o si hacen cualquier otra actividad en la superficie. En realidad, las cubiertas son tan prácticas que hay incluso quienes decoran la zona y la ocupan con pequeños muebles durante el invierno.

Si necesitas saber qué tipo de cubierta se adapta a tu piscina según tus preferencias, necesidades y presupuestos, puedes contactar directamente con nosotros y te asesoraremos de la forma más profesional y cercana posible.

Cubiertas de piscina
Mantén tu piscina como el primer día.
4.

Ahorrarás agua

Una de las peores consecuencias de tener la piscina abierta al exterior es que se produce evaporación y, poco a poco, el nivel de agua va menguando. Esto tiene unas consecuencias directas en tu bolsillo, puesto que, cuando necesites bañarte de nuevo, tendrás que reponer toda el agua que hayas perdido durante el invierno. Pero, con la cubierta tapando la piscina, no tendrás ese problema.

El agua se mantendrá en el interior del espacio de la piscina sin que se produzca el problema de la evaporación con tanta facilidad.

5.

Evitarás problemas en la estructura

Hay quienes optan, cada invierno, por vaciar la piscina para dejarla vacía. Parece una solución ideal, dado que se piensa que, si no se va a utilizar, siempre es mejor no mantener el agua y así evitar riesgos. No obstante, en realidad, no es algo recomendable. Lo que ocurre en el momento en el que vacías todo el vaso de la piscina es que se deja de hacer presión con el agua y la estructura se resiente.

Así, es posible que llegues a dañar más la piscina por vaciarla en invierno que si la hubieras dejado llena e intentado aplicar los consejos y recomendaciones que te estamos dando. A veces lo que puede parecer más lógico no siempre es la mejor decisión.

problemas en la estructura en invierno
6.

No tendrás que invertir tanto al inicio del verano

Cuando pase el invierno y llegue de nuevo la temporada de baño, descubrirás que tienes que hacer mucho menos trabajo para poner la piscina a punto de nuevo. Los niveles de cloro, pH y otros aspectos relacionados con la calidad del agua se encontrarán más cerca del nivel ideal. También apreciarás que la limpieza a la que tienes que someter la piscina y la instalación en general es reducida.

Todo esto repercutirá en tu bolsillo, dado que tendrás que realizar menos mantenimiento de piscinas y utilizar una cantidad inferior de productos químicos que disminuye el gasto final. Por motivos como estos, se puede comprobar que, de manera indudable, tapar la piscina en invierno es una de las tareas que todo propietario de una de estas zonas de baño debe hacer cuando termina el verano.

Puedes pasarte por nuestro artículo sobre los mejores tipos de cubiertas de invierno para piscinas y comprobar las opciones que mejor se adaptan a este periodo de tiempo invernal.

Si necesitas más información sobre cubrir la piscina en invierno, contacta con nosotros. Estaremos encantados de ayudarte.

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